Bajo el vasto firmamento estrellado de aquel pequeño pueblo costero, donde las olas danzaban en armonía con los suspiros del viento, se tejía un relato de amor inolvidable. Un cuento en el que los enigmas se entrelazaban con los hilos de la pasión y el velo de la incertidumbre se alzaba como testigo silencioso de corazones anhelantes. En aquel mágico rincón del mundo, donde los susurros del mar parecían cantar al compás de los latidos enamorados, existía un antiguo faro , vigilante centinela de las almas errantes. Se decía que su luz, en los momentos de mayor esplendor, tenía el poder de unir a aquellos que el destino había entrelazado. Sin embargo, su secreto, custodiado celosamente, solo se desvelaba a los valientes de espíritu, a los audaces buscadores del amor eterno . El Velo de los Sentimientos Cerca del faro, entre las enredaderas de un jardín perfumado, erguía su majestuosidad una mansión abandonada, testigo en silencio de tiempos pasados. Sus muros encerraban un enigma que so...